Hay cosas que hace mucho no cambian. Como mi 1.56 desde segundo de secundaria. O, como esa distracción inherente de la que el 95.5% de mi tiempo soy víctima. Como mi peinado despeinado o mis uñas mordidas. Como esa sonrisa "cachosa" heredada, según Rosana Franco, de mi papá.
Hay cosas que hace mucho no cambian, como esa atracción tan enfermisa que tengo hacia los potos desconocidos...
Maldita sea, soy infiel, creo. Pero una infiel monce, de rango menor, una que peca sólo con la mirada. Total, los ojos están hechos para mirar y volver a mirar (en caso vuelva a pasar delante mio, claro). Sin embargo, tu, debes creerme cuando juro y vuelvo a jurar que el único poto que toco es el tuyo. Por lo tanto, debes entender, que a pesar de todos mi defectos, estoy enamorada de ti. Y, por extencion, de tu trasero.
Hay cosas que hace mucho no cambian y, para serte sincera, dudo mucho que crezca. Tal vez, si mi madre sigue gritando de la forma en que lo hace, logre reducir mi porcentaje de distracción. Pero es bueno que sepas que sólo presto atención cuando te tengo a mi lado. Derrepente me peine de vez en cuando y deje de morder mis uñas. Pero nunca, nunca me pidas que renuncie a tu derrier y mucho menos a ti.
Quién sabe si esta declaración pública de amor te asuste.
Quién sabe si entre tanto que te escribo te logro enamorar.
Quién sabe.
Yo sigo siendo la misma básicamente. Un poquito conchuda, paciensuda, burlona. Hay días en los que no tengo ganas de bañarme, pero la mayoría huelo a jabón Dove. Vivo enamorada de mi perro (tu tranquilo que él es el único mortal con quien podríascompartir mi amor) y, si sigo hablando, probablemente, te desenamore, pero esto es lo que soy y te quiero. A mi lado. O encima mío. Por eso trato de decirte la verdad y exponer todo a lo qe podrías someterte en caso me digas que sí.
Te escribí esto hoy porque no quería publicarlo el mismo día de tu cumpleaños. Para evitar que algún miembro de tu familia, de esos que aún leen el blog de ñam, se entere que sigo enamorada de ti. Pero bueno, que se puede hacer. Lamento mucho no haberte hecho una sorpresota, de esas a las que te tengo acostumbrado. Disculpame, disculpame, disculpame. Si pasas por donde estoy quizás te de una nalgadita, un beso y la versión de esto en físico.
Feliz cumpleaños poto bonito, te mando un chupetonaso indecentaso y todo lo que se te pueda ocurrir que termine en -aso.
Aquí va eso que normalmente digo cuando termino de escribirte algo. Eso de cinco letras, no me hagas decir publicamente que te amo.
Sasha
